La figura de la bailarina ha sido el paradigma de todo lo que puede hacer el cuerpo en pleno uso de sus facultades, incluso de lo que imaginamos que el cuerpo nunca podría hacer. Pensemos por un momento, cuál sería el modelo que podría ofrecer el cuerpo de una bailarina vieja. ¿Sería paradigmático un cuerpo vulnerable, estéril y nada sexi? ¿Sería ejemplar un cuerpo cuya capacidad de dominio es cada vez más limitada? Para acercarnos a estas preguntas decidimos imaginar una criatura ficticia y paradójica: La bailarina vieja.
Ficha artística
Elena Córdoba
Creación de dispositivos visuales y creación del espacio: David Benito
Creación de dispositivos sonoros y creación musical: Carlos Gárate
Iluminación: Carlos Marquerie
Ayudante de dirección: Mar López
Vestuario: Cecilia Molano
Técnico de sonido: Adolfo García